Los datos discretos son un tipo de datos que se presentan en números enteros y se utilizan para medir variables categóricas. A menudo se les denomina "datos de recuento". A diferencia de los datos continuos, los datos discretos sólo pueden asumir un número limitado de valores dentro de un rango determinado.
En informática, los datos discretos se utilizan a menudo para describir situaciones con múltiples resultados, todos distintos y separados. Por ejemplo, una base de datos podría contener datos discretos que rastrean información como la edad, el sexo o el código postal de un cliente. Otros ejemplos de datos discretos incluyen el recuento de clientes que han visitado un sitio web, la cantidad de correos electrónicos enviados o la cantidad de ventas en un período de tiempo determinado.
Los datos discretos generalmente se almacenan en una base de datos o una matriz numérica y se pueden analizar utilizando varios métodos estadísticos. Se puede utilizar para crear un histograma para visualizar los datos, calcular la media y la desviación estándar de los datos o predecir resultados futuros basándose en resultados pasados.
Los datos discretos tienen muchas aplicaciones en los campos de la informática, las matemáticas y la estadística. Por ejemplo, se puede utilizar para modelar el comportamiento de los clientes, analizar datos financieros y crear modelos de riesgo. Además, se puede utilizar para calcular probabilidades y hacer predicciones en los campos de la ingeniería y la medicina.
Los datos discretos son un concepto importante para los informáticos, matemáticos y estadísticos. Puede ayudar a revelar patrones en datos del mundo real y puede proporcionar información sobre cómo actuar según esos patrones. Con un análisis adecuado, se pueden utilizar datos discretos para ayudar a las organizaciones a tomar decisiones más efectivas y ayudar a crear una mejor comprensión del mundo.